Nombre: Juan Carlos Tajes Baddouh
Lugar de nacimiento: Montevideo, Uruguay
Residencia actual: Amsterdam, Holanda
Miembro desde: 26/11/2015


Poemas incluidos en esta página:        
      
            -      LOS TIRANOS.
-      URUGU Ay.
-      PATRIA.
-      LOS CONFINES DEL  AGUA (I A VI).
-      ALCORNOCAL.
-      BOSQUES.
-      VACAS SOLAS.
-      PASIÓN – VEGA – COPLA (I A IV).
-      JUVENAL.
-      LA RAÍZ 2276.
-      LA MARÍA.
-      HIROSHIMA.
-      POEMA DEL QUERER Y NO QUERER.
-      SIMPLEZA.
-      DESTANGADOS.
-      MINOTAURO.
-      OBSTINACIÓN.
-      VERDE SONETO.
-      SONETO DE LA DESESPERANZA.


 
LOS TIRANOS
 
 
Los tiranos no tiemblan
los tiranos mueren
en la cama
con la conciencia limpia
manos y sábanas
blancas
esterilizadas
como gasas
como algodones.
 
Narcotizados
sedados
escamotean
sus cuentas con la historia
morosos de la justicia
nunca pagarán
renta acumulativa de
muerte
sangre
dolor.
 
Respetuosos apóstoles
de códigos y decretos
amparados por botas
custodiados por balas.
 
Patria
cárcel
sinónimos
en el nuevo diccionario
de la infamia.
 
Autocracia
Horror
dioses
adorados en templos
con barrotes.
 
 
2013 (Patrias)
 
 
 
 
 
URUGU Ay
 
 
Y si cumplir sabremos
pero no queremos
porque para qué y por qué
aunque cambiemos
y si la tumba
no fuera más la patria
ni la matria ni la fratria
y si el grito no salvó ni salivó
ni el entusiasmo inflamó ni influyó
y si el don de sacrosanta gloria
no lo merecimos
porque no somos como nos vimos
pero si como creímos
en profesión de fe
de lo que nunca fuimos
porque esta libertad no es para todos
y no nos hace iguales
porque los otros no somos nosotros
son de otra piel 
son de otro pelo
son desiguales 
son pobres
y más bajos que el fondo
de los bajos fondos
donde se raja y te raja
el barro del barrio
adonde el dar no es compartir
ni el compartir es dar
porque en
democracia
demos gratis
demos gracias
no nos quejemos
hermanos
ni cantemos
y sobre todo
si aún nos queda el alma
para anular el voto
no nos pronunciemos
ya veremos
 
 
 
2013 (Patrias)
 
 
 
 
PATRIA
 
 
Pobre patria,
en manos de vehementes protectores.
Pobre patria,
en la idea del rencor y la revancha.
Pobre patria,
defendida por aquellos que la ofenden.
Pobre patria,
que se basta a si misma,
que de nadie nada espera.
 
Si Artigas, el de antes,
si Artigas, el que calla,
si ese Artigas viviera,
no querría esas voces,
no querría esos gritos.
 
De este lado del río,
de aquél lado del sueño,
él no quiso ser héroe,
no quiso ser estatua,
no quiso ser el bronce.
Pretendió, solamente,
intentó, humildemente,
despertar la conciecia dormida,
avivar la pasión,
dar valor a su pueblo,
darle fe en si mismo,
para que fuera libre
de toda ideología,
libre de libertad,
libre de fanatismo.
 
La patria, qué es la patria?.
La patria, si es que existe,
no sabe de patrones,
no exige contingencias,
no espera sacrificios.
La historia, que es la suma
de hechos y de fechas,
no se inventa,
no acepta actos de fe,
reniega procaces propagandas,
a si misma se basta,
le guste a quién le guste,
y a veces es la historia
un mito y una farsa.
 
Nuestro pais no es fruto
del odio y la venganza..
Nuestro pais es fruto
de logros y de hazañas,
de nobles pensamientos,
y del respeto mutuo,
respeto a los humanos,
respeto a los hermanos,
a todos esos muertos,
injustamente muertos.
No existimos
por gracia de nosotros,
existimos
los unos con los otros.
 
Artigas no quería
el rencor y la discordia,
quería rebelión,
rebelión verdadera,
la rebelión del hambre,
la rebelión del justo,
y no la rebeldía banal
de las barrigas llenas.
 
Me duele mi pais,
me duele, aunque no vuelva,
me duele por el río,
me duele por el cerro.
Tanto me duele y sigue
mi dolor, como un cuerpo
hecho todo de hermanos,
y yo no estoy con ellos.
 
 
 
 
2014 (Patrias)
 

 
 
LOS CONFINES DEL AGUA
 
I
 
Atlántico boreal, mar de mil aguas,
oceánico cristal enverdecido,
corriente, sal y espuma desolada
sobre la piel curtida del verano,
lobos de mar aullando a las gaviotas,
heridas por el sol de nubes rojas.
Atlántico ecuatorial, playa africana
en fuga de cangrejos por la orilla.
Atardecer, palmeras y atabales,
mi cuerpo hundí en al agua quieta y negra
para lavar la sombra de otro cuerpo,
restos de almejas muertas y morralla.
Atlántico austral, arenas negras,
volcán, lava y basalto, fumarolas,
heladas transparencias submarinas.
Distancia adonde negros cachalotes
surcan lentos la paz del horizonte
y enigmáticos cagarros parlanchines
entreveran en diálogos nocturnos
su lenguaje de pájaros borrachos.
Catapultadas en medio del océano,
verdes islas del magma y del asombro,
lugar de encuentro de los vagabundos
marineros de paso en la leyenda,
siempre de paso en busca de mareas
celebradas en anclas, cuerdas, brea,
en gin tonic y sopa de ballena.
 
 
 
 
II
 
Mar Marenostrum, mar Mediterráneo,
mar no mío y mar de tantos otros,
mar bíblico y mar de muchos nombres
mar mítico de tierras y de guerras,
mar caos, confusión de viejas lenguas,
mar de Jesús, de Jonás y de Odiseo,
mar de esta vida, barca de la vida,
la vida es mar y barca a la deriva,
es Jónico y Egeo, Adriático y Tirreno,
agua heroica de Hércules y Eneas
y ahora mar del llanto y la vergüenza,
de ataudes flotantes en la niebla,
mar de ignominia, de ilícitas andanzas
de mercaderes de cuerpos y de armas .
 
 
 
 
III
 
Mar de Java, anémonas marinas,
corales fluorescentes, otras islas,
otro collar de verdes esmeraldas.
Entraña ardiente cruje Krakatoa
en erupción, en lluvia de cenizas
sobre los grises troncos calcinados,
humeante piedra, árboles sin pájaros.
Krakatoa niño, hijo de madre Krakatoa,
sumergida en el mar, nombre de estrépito.
Fue la tormenta y fue barco al garete,
como un lecho de muerte húmeda y fría,
como el siniestro sibilar del viento,
como la redención última del miedo.
 
 
 
 
IV
 
Caminé a orillas del Báltico
Playas de arenas blancas,
la nieve sobre el fiordo.
Cuerno de Oro, brillante el Bósforo,
temblorosos minaretes, bajo un puente  
el grito agudo de los pescadores.
La cara me mojé, fue en el Pacífico,
una costa ignorada de Japón,
de bruma radioaciva y de tifones.
Mi bisabuela desafió al Arábico
y Basora le dió su toponímico,
Basraubi nos legó como apellido.
La otra se bañó en el Cantábrico
y fué su largo viaje hacia el futuro
para origen y cuna de mi gente.
El Mar del Norte es el mar de mi destino,
aquí tejo mi vida cada dia 
y aquí tejen mis hijas sus designios.
 
 
 
 
V
 
Me quedan otros mares, otras aguas.
No conozco las orillas congeladas
de los remotos Ártico y Antártico,
no viajé al Caribe o las Antillas,
el Cáucaso o el Caspio son extrañas
soledades del agua, y el de Barentz,
de loco aventurero, ha de esperarme en vano .
 
 
 
 
VI
 
Se que dioses, ondinas y nereidas
engañosas sirenas, medusas y tritones,
los espíritus del agua y la tormenta
me regalan en dicha sumergida
otra Atlántida y otro desencanto.
Porque de joven soñé con los Sargasos
Aqueronte me espera en un final certero,
con Caronte, el último barquero.
 
 
 
2015 (Mar y Campo)
 
 
 
 
ALCORNOCAL
 
 
Este árbol,
despojado de su corteza temporal
ramas abajo,
tronco impúdico,
ignorante
de la propia desnudéz
como un fantasma
del pasado vegetal.
 
El otro árbol
seco y desnudo,
centenario testigo
de la melancolía.
Sin Godot,
sin espera,
sólo arbol que fue.
 
Sombra del árbol
que ya no asombra
ni da sombra,
Arbol que alarga su sombra
ante el último sol.
Dorada silueta invernal
en la suave colina Alentejana.
 
Arbol, hermano,
padre, hijo,
gérmen, fruto.
Eternamente arbol,
antes y después de hoy,
visto ahora por mi
y rescatado
para siempre
del tiempo y del olvido.
 
 
 
2005 (Mar y Campo)
 
 
 
 
BOSQUE
 
 
Ärboles fantasmas
navegan en la niebla,
claroscuros
de repetidos sueños,
más altos por la noche,
noche oscura del alma
y acercan la distancia
cuando no estás conmigo.
 
 
 
1995 (Mar y Campo)
 
 
 
 
VACAS SOLAS
 
 
Desde una esquina del prado
las vacas me miran fijo
pero no saben quién soy.
 
Robustas ancas al viento,
vacas echadas al sol
ignoran si vengo o voy.
 
Ojos de mirar lejano,
cada una en su indolencia
espanta el mismo moscón.
 
Asi yo, como las vacas,
echado en medio del campo
en un permanente hoy,
 
rumiando mi descontento,
sin ayer y sin mañana
espero a que pases vos,
 
indiferente viajero,
y no me mires ni sepas
si estoy, si vengo o si voy.
 
 
 
2008 (Mar y Campo)
 
 
 
 
PASIÓN – VEGA- COPLA
 
El peligro del amor
es convertirse en pasión
 
 
I
 
La cama en que fué parido,
él, que murió en cama ninguna;
las silla, el andador,
el caballo de madera
y el extraño pasadizo
debajo de la escalera.
 
 
 
 
II
 
Lluvia en Fuente Vaqueros.
Los hombres en el café,
sin ser los mismos
aún tienen
los mismos rostros adustos.
Labradores, jornaleros,
tan serios, tan bullangueros.
Ojos negros
que se abren al silencio.
 
 
 
 
III
 
Casa blanca,
cuaderno limpio 
para escribir un verso,
sábana blanca
para proyectar sombras
de personajes inciertos.
Por esaa calle
Corría un niño
Ignorando su suerte,
su mala muerte.
Aquí,
a mi lado,
un niño
que pudo ser él mismo.
 
 
 
 
IV
 
En un  costado se pierde
el paisaje de la Vega.
Entre colinas mojadas,
enmarcando la tierra y la montaña,
los plantíos compiten con el cielo
una pugna de límites visuales.
Ignoro si esta primavera
de floridos frutales,
de naranjales de oro,
es o fue la antigua primavera
de la infancia feliz
de sol, de caracol, de mariposa.
Es preciso conjugarlo todo
para reconciliar la fantasía.
Desde lejos
el pueblo está más cerca,
la lluvia se idealiza
y es parte del silencio.
 
 
 
2000  (Lorqueana)
 
 
 
 
JUVENAL
 
 
Por ser jóvenes
tan jóvenes
llenábamos las calles de insolencia
provocábamos patillas y melenas
acusábamos insípidos bigotes
lucíamos heroicas ojeras
de trasnochar por nada
y el sobaco preñado de libros
y de urgencia
la ciudad inundada de nosotros
y nosotros pletóricos de rabia
caminando sin rumbo por las noches
guardianes del asfalto
jerarcas del insomnio
inventando la lucha del mañana
complotando mañanas con sus noches
iracundos sin tregua
sin descanso
neonatos del beso y de la pluma
primerizos del sexo y de las balas
le dimos cara a cara
a la vida
verso en ristre
prosa cáustica
rima libertaria
romantizando epítetos prestados.
 
Eran rojas palomas y gaviotas
tenía veinte años la tristeza
y las lágrimas tenían veinte años.
 
Cuántas veces subidos a los árboles
hablábamos de amor
los zapatos hambrientos por el suelo
mientras que él trepando se subía
la escalera de hijos hasta el cielo
para verla y amarla.
 
El inmóvil viajero
Ulises se llamaba
y fuimos sus amigos.
 
También hubo el amigo
tan amigo
que en un hotel al paso
durmió el último sueño
de pastillas y olvido
el tumultuoso sueño
de Lázaros andantes
que abrían al crepúsculo
sus pálidas ventanas
cuando la sangre era
un aullido de auxilio
sin plegarias
en la anónima nada
en ningún lado nadie
sólo él que fue
tan solo
tan Abel
tan hermano.
 
La poesía y nosotros
tan solos nos quedamos.
 
A la sombra del arbol
que la luna bailaba
se proyecta el fracaso
de la desesperanza
allí estalla el cerebro
dó la razón se fragua
en el letal abrazo
de la soga y el cuello
de la soga y la rama.
 
¿Por qué es flaca la sombra
del poeta que danza
suspendido en el aire?
 
Como una campana
 silenciosa y cansada
Ariel se balanceaba.
 
No nos ve. No nos mira.
Des-almado se eleva
en un vuelo sin alas.
 
Una ráfaga aventó el calendario,
el orden trastocó de los callados días.
Las playas, las colinas, los esteros,
el césped de las plazas, las esquinas
resonaron de botas y decretos,
se hizo orden el grito autoritario,
fue moneda corriente la denuncia
y el miedo se instaló como un fantasma
en el horror de unos contra otros.
 
Asi con esa angustia cotidiana
se hundió mi corazón en esta orilla
del agua gris que une y que separa.
Ya se cayó la flor en ese rio
arrastrada en la espuma de los días
adonde griran círculos concéntricos
en un juego de viejas geometrías.
 
Asi el recuerdo amansa y desdibuja
el sabor de la sopa de mi madre
las manos de un amigo
y lo que fue la risa de mi hermana.
 
Juventud
es ahora otro vocablo
es no-palabra
no-opción
lo que se-ha-ido
cuando te miro y veo las patillas
en un rostro distante
barba y pelo
al aire de otros vientos
el secreto que guardan nuestros ojos
de lo que vimos 
lo que no dijimos.
 
Ser joven
no tan joven
fue el pacto
para un siempre
o apenas todavía.
 
Tú y yo
dos
en memoria de los otros
los amigos
que nos esperan
en el patio trasero del olvido.
 
 
 
2008 ( Tiempo de palabras)
 
 
 
 
LA RAIZ  2276
 
 
Veintitantos escalones suben y bajan, cada día,
al corredor donde se abre
el estrecho y pulcro apartamento
en el que nací, pasé mi infancia
y  enajené los años de juventud.
pocos años,
gastados en días desiguales,
en horas trasnochadas,
en la sola pretensión  de ser
un poco mejor, o apenas diferente
a los otros de mi estirpe.
A partir de esta mediocre vanidad
llegué a olvidarme
del teniente coronel hispanohablante
y del judío errante, los dos sumandos
que formulan mi ecuación.
Veintitantos escalones, más o menos.
En mi esquina no hubieron Paicas Ritas,
ni Malenas, ni obtusas Milonguitas.
Y en la umbría del tétrico balcón,
al que no me asomé porque no fue,
no cursileó mis noches la profana
fragancia de la rosa que engalana,
sin hablar del jazmín o del vergel
gangoseados en tangos por Gardel.
Por mi calle pasaban los tranvías
rechinando su herrumbre
y con la lluvia
se formaban torrentes torbellinos
en las alcantarillas, donde el agua
soñaba con ser agua del océano.
Pero el agua inundaba las veredas,
en las que yo soñaba chapotear
con mis zapatos nuevos.
Al subir y bajar por última vez 
los escalones,
tuve miedo de no llevar la cuenta
y de que en lugar de veintitantos
fuesen exactamente veintiséis o veinticuatro,
para no romper el hechizo
del álgebra de peldaños gastados
y la cábala de zancadas impares.
Mi madre desvelaba las noches.
Mi padre despertador del alba.
Ante el número diez cerré la puerta
sin guardar las llaves.
El cerrojo cantó el monótono cadish, 
credo y oración  de la niñez/vejez,
sin amén. Y el nunca más de aquél volver,
sin marchitada frente,
sin nieve, sin tiempo, ni sueño de ayer             
 
 
 
2001 (Tiempo de palabras)
 
 
 
 
LA MARÍA (in memoriam Maria Callas)
 
 
A la María se le escapó
el pájaro del nido de su voz,
se le murió la magia.
 
Ahí quedaron  las notas
desgranadas
entre los estertores del alma.
 
Asomadas a la garganta
se caían de desesperacón
en el abismo de lo que fue.
 
Órgano oscuro,
metal con gusto sangre
brotando de la herida vital,
cual diapasón de fibra muscular y cardíaca
vibrante a las puertas de la muerte
con fineza de amante.
 
Por fin, gastado el genio,
aullando música,
enmudeció para siempre la campana.
 
De regreso a la luz extravió el vuelo
en la tormenta suprema. La tristeza,
pico quebrado, ala desplumada,
con un quejido rauco cual remedo
de melodías celestes, de ademanes bravíos,
fantasmas a tientas por la sucia neblina
escenarios desiertos,
ropajes vacíos,
fingidos abrazos,
contra el oropel  de su otra realidad
ficticia y posteragada
sin amor, sin color,
sólo pobre instrumento sin brillo,
mudo para siempre
en la higiénica soledad del cuarto de baño.
 
Mientras el vinilo gira
el eco de un suspiro se aleja del tiempo
y esa otra que fue ya esta aquí para siempre
en el agudo perfecto que desgarra la carne
en la sublime cadencia,
en el escándalo impúdico
a telón abierto,
en el íntimo misterio
y en la abyecta miseria.
 
 
 
2008
 
 
 
 
HIROSHIMA
 
 
Dejé la flor aquí
en Hiroshima
blanca flor de azucena
en Hiroshima
el olor de la flor
en Hiroshima
la cúpula y el hierro
en Hiroshima
llanto de niño ausente
en Hiroshima
 
en busca de un luigar
en Hiroshima
caminé calles
plazas
galerías
encontré bares
gente
nadie
nada
muchas nadas
pocas voces
silencio
indiferencia
olvido
sombra de olvido
lágrima seca
en la noce
en la ruina
 
noche que ya no soy
en Hiroshima
extranjero depaso
en Hiroshima
el afán y el trabajo
en Hiroshima
el escarnio y el lujo
en Hiroshima
 
mañana es el cuaderno
el dibujo
el puerto y la ventana
el recuerdo
y el recuedo del puerto
de una calle
el hotel
de una noche
en Hiroshima
la noche que no es mia
que es memoria
un idea
de aquél escalofrío
en Hiroshima
siempre de noche
siempre
y de dia.
 
 
 
2014
 
 
 
 
POEMA DEL QUERER Y NO QUERER
 
 
No me gusta hablar de amor
prefiero el verbo erecto
no quiero compararte
flor/perfume/estrella
no ser profundo
no quiero ser no quiero
pero quiero nombrarte
desearte gozarte
ser uno + uno = uno
banal prosaico
perderme en
sobaco/lengua/vientre/cuello.
hoy quiero
ser lo contrario de ayer
transgredir
las claves de mañana
los códigos del tiempo
ser sincero y aún siéndolo
dejar de serlo
 no ser
y ser uno y dos y ciento
no quiero ser el que no dice
el que no piensa
el que no duda
el que no acierta
el que contradice
el que desconcierta.
el dudoso
el obscuro
el que no osa 
el que flojea
ya no seré
el que reniega
el que no teme
el que te mira
el que respira.
aunque por ser
queriendo y no queriendo
vamos pasando sin pasar
y a veces
hay nada y algo
o hay palabras.
 
 
 
2014
 
 
 
 
SIMPLEZA
 
 
Fácil
matar es fácil
maquinar el atentado
elegir el arma
y por un momento
adueñarse del miedo
3 armas = 3 dedos
muertes imprecisas
la sombra indefinida
de profetas
que ya no profetizan
de creadores
que ya no crean
de dioses
que ya no rien
de santos
que ya no santifican
de sabios
que ocultan su saber
y nosotros los burlados
y nosotros las víctimas
y nosotros los anónimos
matar es fácil
lo difícil es morirse
el crimen
es acreedor y deuda
el crimen no es un fin
es un principio
enunció Sófocles
por boca de Yocasta
pero Yocasta ya no rie
ya no rie.
 
 
 
2014
 
 
 
 
DESTANGADOS
 
 
Hoy me destangaría por vos
tan destangado
como verso suelto
para tanguearnos después
con más ahinco
con más ganas de ser
y con más ritmo.
 
La tanguedad
nos acecha
nos agazapa
nos asalta
nos atrapa
nos agarra
y nos roe.
 
Salvaje tangación
atea
iconoclasta
adictiva
indeseable
imprescindible.
 
Tanguéz procaz
tanguéz precoz
muertos de tanguidad
los dos
revolcándonos
en pasión tangardiente.
 
 
 
2015
 
 
 
 
MINOTAURO
 
 
Será una noche y dos y serán tantas
y tan pocas las horas para amarnos,
que en el temor de no saber gozarnos
nos perderemos sin gozar. Aún cantas
 
La eterna juventud, sin saber cuántas
espinas da el amor, que al engañarnos
deja pendiente el rito de olvidarnos
y humilla la verdad. Ya no me espantas.
 
Te conocí, reconocí tu estilo,
el ansia en la mirada, el gran regazo,
la vanidad de haber sufrido. El hilo
 
se romperá al final del laberinto
y a solas con el monstruo, entre mis brazos,
tendrán tus labios un sabor distinto.
 
 
 
1988 (Tiempo de palabras)
 
 
 
 
 
OBSTINACIÓN
                    
                         A.vH.
 
Porque te quise si, porque te quiero
y te seguiré queriendo mientras viva
hoy tan solo me queda la lasciva
fantasía del cuerpo, donde espero
 
gozar aún del fétido agujero
dejando el corazón a la deriva
en tu mar de caricias , con la esquiva
sensación de que soy un marinero.
 
Y echo el ancla al deseo tan soñado
de ser el dueño de tu sexo alado
como lo fuera ayer, ciego y vehemente.
 
Ahora sé que voy tras la manía
de una pasión enferma, cual la mia
que aún espera morirse de repente
 
 
 
1988 (Tiempo de palabras)
 
 
 
 
VERDE SONETO
 
¡Ay, esperanza, sos lo que se pierde
porque Cortázar te embrocó en la ruta
disfrazada de virgen y de puta,
con ese vestidito pobre y verde!
 
Yo sé que sos la bestia que no muerde
y sé que sos la tentadora fruta
que ante la falsedad ya no se inmuta.
El que no te venera siempre pierde.
 
Ilusión o mirífico espejismo,
destino, hado, sino o fatalismo;
todos te nombran, sórdida esperanza.
 
Hay quien te niega, quien te ruega, implora,
te invoca cree y hay el que te adora,
el que te busca y que  nunca te alcanza.
 
 
 
2015
 
 
 
SONETO DE LA DESESPERANZA
 
 
Hoy quiero ser Paris, lloro la muerte,
lloro la sinrazón y la violencia,
reclamo con mi verso hecho de urgencia
un voto por la paz, porque es más fuerte
 
la razón que el horror; y que el espanto
de tanta sangre y tanto desconsuelo
ponga un punto final en este duelo
de venganza, de crimen, de quebranto.
 
En la noche sin sueño de la historia,
en las dudas de la frágil memoria
hay preguntas que ya nadie responde.
 
Agotamos las fuentes del destino,
desviamos la senda del camino
que nos ha de llevar quién sabe adonde.
 
 
 
2015
 
  Presentación oficial en Amsterdam del poemario "Tiempo de Palabras" de nuestro delegado cultural en esa ciudad, Juan C. Tajes, publicado por Ediciones Arlequín de San Telmo.
 

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