-
PRECIOSA
(octavilla real)
Cuando se duerme preciosa,
Niña de lánguidos ojos,
Cuando la sábana rosa
Hace acallar sus antojos;
Vuela en su tierna almohada
Con un vivaz parpadeo,
Con un sutil aleteo
Como por hadas besada.
Tiene preciosa la piel
Y las sonrisas más bellas,
Tiene los ojos de miel
Donde se esconden estrellas.
En el hueco de su cara
Cuando aparece un hoyuelo
Se pinta un trozo de cielo
Y una mar serena y clara.
Cuando se duerme preciosa,
Niña de rojas mejillas,
Una blanca mariposa
Aleja sus pesadillas.
Y sus manitas pequeñas
Como en oración se pliegan,
Alzadas al cielo ruegan;
Parecen alas risueñas.
Duerme preciosa, tranquila,
Que no te cubra la luna
Que envidiosa te vigila
¡quiere robarte la cuna!
No sabe la muy celosa
Que por ti me muero y lloro
Mi más preciado tesoro…
Duerme mi niña preciosa.
SI ACASO
(Cuartetos)
Si acaso, tú mi nombre preguntaras
Te diré que mi nombre no es consuelo,
Ni es deseo, mi nombre es puro anhelo…
Si acaso tú mi nombre susurraras.
Si quieres entender por qué mi boca
Enmudece y se cierra sin motivo…
Si acaso preguntaras por qué escribo
Será porque tu risa me provoca.
Es grande tu sonrisa, franca y loca;
En la nieve, tu risa es fuego eterno
La letra que le falta a mi cuaderno,
Es la llama voraz que se desboca.
Es la carne que en versos se deshace
Los goces que susurro entre mis dientes,
La humedad de mis sueños más calientes
La pasión que en mi boca se complace.
Te observo en el silencio de las hojas,
En la sombra que invoca tu silueta
Escrita con mi tinta de poeta,
En libros donde ahogo mis congojas.
Si en mi pecho apoyaras tu cabeza
Y el alba tu sonrisa iluminara,
Si mi piel a tu piel acariciara,
Podría emborracharme de belleza.
Si tu pelo enredado en la almohada
Acunara la noche en su regazo,
La luna fundiría de un chispazo
¡pobre luna, al olvido relegada!
He cambiado el aroma de las flores
Por lava cenicienta de un volcán
De mis pies, he limpiado el alquitrán,
Derramando en mis versos sinsabores.
Si acaso con mis ojos tú soñaras
Te diré que en mis ojos no hay desvelo,
No son verdes mis ojos caramelo…
Si acaso, tú mis ojos contemplaras.
DIGNIDAD
(Alegrías)
Al despertar
se alza una vida con dignidad.
Siente en su pecho
la flor que un día murió en secreto.
En su sonrisa
perlas ajadas de tanta vida.
Cruzan sus ojos
pequeñas nubes de grises tonos.
Trazos escritos
sobre un pellejo desconocido.
Ya duerme sola
nadie la escucha, nadie la nombra.
Es su consuelo
el dulce aroma del mar inmenso.
Rasga los cielos
la estela negra de su silencio.
Nunca la luna
alumbró menos en noche oscura.
CORAZÓN DESANGELADO
(Verso libre)
Un sinfín de estrellas rutilantes
acompañan mis sueños fugitivos,
un coro de acordes infinitos
cobija en su espacio mis pesares.
No te duermas corazón salvaje,
prisionero de esperanzas vanas y desencuentros;
sabes que tu lucha no es injusta
sabes que la culpa no es tu culpa;
pasajero inoportuno en la nave de tu tiempo.
No te duermas corazón abandonado,
si sueñas bajo el palio de unos labios que imploran,
bajo el arco de una flecha que no alcanza su diana.
Si recorres el sendero sin mirar a tu espalda
y dejas la sonrisa congelada en otras bocas.
Ven conmigo, corazón despistado,
persigue con tu aliento la auténtica,
la eterna melancolía, que sin brechas
late al compás de esa sangre
que aletea en tu esencia angelical.
¡no despiertes corazón desangelado!
HE VISTO AL MAR
(Soneto hexadecasilabo u octonario)
He visto secarse el mar y me quedé sin sentido,
soñé ver el sol temblar algún día el mes de enero,
pude nubes abrazar y fingir que no me entero,
sentí el dolor fondear y puse rumbo al olvido.
Alguna noche el silencio grita tu nombre a mi oído,
algunos días elevo mis ojos a un dios ligero,
y el vacío que me llega solapa la voz que espero,
algunas veces no supe cantar un verso sentido.
He imaginado que un día la esperanza viene a verme,
que envuelta en miles de abrazos su misterio me apabulla,
como queriendo abrazar con dulzor mi cuerpo inerme.
Pero he visto al sol morir y al partir el sol no aúlla,
pero vi secar la mar y no quiero que el mar yerme,
yo escuché al dolor gritar y el dolor nunca murmulla.
LOS ASTROS
(Trioletos)
Callaron los astros… ¡Silencio sin par!
murieron desnudas millones de rosas
las olas secaron sus risas nerviosas.
Callaron los astros… ¡Silencio sin par!
Los besos negaron las bocas curiosas
las almas cansadas galopan furiosas.
Callaron los astros… ¡Silencio sin par!
murieron desnudas millones de rosas.
LAS MUJERES
(Liras)
¿Dónde están las mujeres?
prestas y valientes en las batallas,
¡esos gloriosos seres!
de manos como agallas,
que arrojan de sus cuellos las medallas.
¿Huyeron las guerreras?
se rebelan sigilosas, a oscuras
¡cuentan que son quimeras!
y en sus manos tan duras,
ignoran que serán muertas futuras.
¿Se van las luchadoras?
lamiéronse las heridas internas
¡otrora las señoras!
y con sus manos tiernas
dejaron de soñar con largas piernas.
¡Murieron las doncellas!
vistiéronse lustrosas armaduras;
amparadas en ellas;
sus manos y cinturas
acallaron perpetuas dictaduras.
CUANDO NO ESPERABA NADA
(Verso libre”)
Y cuando ya no esperaba nada
tú me viniste a buscar.
Y cuando ya mi pelo plateaba
Tú, me sacaste a bailar.
Caballero zalamero
De gesto amable y gentil,
amor de otoños dorados,
de inviernos por descubrir,
de espléndidas primaveras
y de veranos, a la sombra huir.
Y cuando ya no esperaba nada
cuando ya mi pelo plateaba…
tu sonrisa, mi estancia llenó,
tu voz, mi alma rozó,
tu figura, en mi cama anidó.
Aliado de días eternos
Compañero de infinitas noches,
Amigo de amaneceres inciertos.
Y cuando ya no esperaba nada
y mi pelo plateaba…
tu tiempo al mío llegó,
tu espacio, el mío ocupó,
tu ser, a mí ser enamoró.
MUERE EL POETA
(Estrofa Julia)
Se fue el poeta
se fue en silencio, con su voz rota,
entre la hiedra
llora la madre; su grito flota
sobre la tierra.
En la penumbra de noches tristes
pasan los años,
vagas a solas y te resistes.
tus pies cansados,
tus ojos… dicen que aún existes.
En tu memoria
las hojas blancas llenas de besos
¡qué gran victoria!
danzas eternas que en dulces versos
saben a gloria.
Cuando las flores
a sangre huelen, a sangre nueva,
en los rigores
de tu desierto, pintar quisieras
nuevos albores.
Se fue tu vida,
se fue cantando aquella tonada
que te decía:
-amor, si parto, mi piel soñada
será tu orilla.
Y si me pierdo, ¡mi vida! Juro
que he de volver,
seré las letras de un verso puro;
renaceré
entre las piedras del viejo muro-
Echan raíces en tus sentidos
tantos soñares,
que en el tormento de los olvidos,
pintas paisajes
de soles rojos y de sonidos.
Se fue el poeta
pero sus versos te dan la vida;
con mucha fuerza
y hasta los cielos, llega encendida
su letra inmensa.
Se fue el poeta
y con tus dedos vas dibujando
las letras bellas
que entre suspiros van embrujando
tu vida plena.
AMORES BALDÍOS
(Tankanat)
Por la vereda
se fueron deshojando
las margaritas
y en sus pétalos puros
tus promesas murieron;
Del río que acunó
los amores baldíos,
las aguas mansas,
bajaron caudalosas
ya, sin amantes.
A JOSEFINA MANRESA (ESPOSA DEL POETA MIGUEL HERNÁNDEZ)
(Jotabeá con doble rima)
Quiero vestir la piel de una mujer valiente
Que, entre tinta y papel, nunca bajó la frente.
Fue rayo de agonías, la voz de aquel poema,
de unas cuencas vacías, fue la memoria extrema;
fue, en las noches más frías, el fuego que no quema
y entre lunas umbrías, fue simiente, fue emblema.
En tierra descontenta, dio a luz su propio mundo
con la sangre sedienta de su vientre fecundo.
Su risa, siempre fiel a su querido ausente;
resuelta en alegrías, compañera suprema
de esa nana que alienta mi respeto profundo.
MIS SENTIDOS EMBELESAS
(Enéada)
No me seduce el dinero, me seduce la alborada
no me enamoran las joyas, me enamora tu mirada,
cuando en tus ojos reflejas, la pasión más desatada.
Cuando tu boca, a mi oído, me transporta al infinito
cuando me pierdo en tus brazos y me siento pequeñito
y entre tus pechos cobijo mi deseo…mi apetito.
No me fascina el poder, me fascina tu nobleza
ni me hechiza la impostura; solo tú con tu belleza
embelesas mis sentidos y perturbas mi cabeza.
APARIENCIAS
(Décimas)
No sólo las rosas rojas
que plantó aquel jardinero
y cuidó con tanto esmero,
son paño de mis congojas;
lo serán las verdes hojas
que entre púas traicioneras
padecieron mis maneras,
aplacando con sigilo,
con respeto y con estilo,
mis amarguras sinceras.
Cuando basta la conciencia,
para discernir lo bueno
del peligroso veneno
tan de moda y que es tendencia
¡cuánto sobra la apariencia!
Que todo el brillo no es oro
ni cualquier grito es canoro;
también la hojalata brilla
y hasta la voz más sencilla
puede ser un gran tesoro.
PROVENGO
(cuarteto de pies cruzados)
Provengo de una tierra donde el sol es emblema,
de una tierra que aguarda silente y sometida;
envuelta en el esparto, allí la culebra anida
en agostados cerros, de lucidez extrema.
Provengo de una tierra que regala mañanas
y ocasos; que sublima fragancias y colores.
Una tierra de ensueños forjados en clamores,
de voces reprimidas en gargantas profanas.
Es la pasión de un pueblo que acumula en sus calles
luces blancas del tiempo; gestos, palabras, manos…
labios y risas tiernas de niños y de ancianos;
son historias que evocan montes, mares y valles.
Las noches en mi tierra, traen consuelo y hechizos
de espuma, que, en la arena, dibuja sus fronteras
con versos inspirados en brisas marineras
y trazan en mi piel, tonos de cielos rojizos.
CAMINO
Camino antiguo y soleado,
camino, atajo desolado;
por tus tierras, camina mi alma
por tus piedras, un día al alba,
gime el viento, gritando su dolor,
cae la lluvia, pidiendo tu calor
y sus gotas transparentes,
encierran el sabor de un viejo recuerdo,
guardado con amor.
Unos pasos silenciosos
te recorren despacio;
cautelosos, siguen tu ruta, asustados.
Y se pierde el canto de los pájaros
en el espacio, sobre el riachuelo;
donde aquel ser angustiado, se ha mirado.
Desde el infinito
se escucha la realidad
y se siente, perdida, la honda soledad.
Camino antiguo y soleado,
atajo escondido de enamorados,
en el silencio de tu noche
se pierde la razón
y en la paz de tus guijarros,
se desgarra el corazón.
Webmaster: soydelfrater1@gmail.com